Gastroenterología / 10 enero 2025

Probióticos: ¿Un arma de doble filo? Lo que debes saber sobre resistencia a los antibióticos

Probióticos: ¿Un arma de doble filo? Lo que debes saber sobre resistencia a los antibióticos

Seguramente escucharás a mucha gente decir que comiences el año tomando probióticos para mejorar tu salud intestinal,  pero esto podría tener el efecto contrario y podrías estar generando resistencia a los antibióticos.

¡Cuidado con esta arma de doble filo!

Con el auge de la promoción de estos productos, es importante que nos detengamos a considerar los posibles riesgos asociados a su uso. Un estudio reciente ha puesto bajo la mira un aspecto crítico que debe ser motivo de reflexión para todos aquellos que buscamos mejorar nuestra salud digestiva  ya que sin saberlo podríamos estar generando resistencia a los antibióticos.

¿Por qué nos preocupa esta situación?

La resistencia a los antibióticos se ha convertido en un desafío de grandes proporciones para la salud pública a nivel mundial. En el estudio titulado “Evaluación del riesgo para la salud de los suplementos probióticos desde la perspectiva de la resistencia a los antimicrobianos”, se señala que los probióticos que contienen genes de resistencia a los antimicrobianos (ARG) podrían plantear riesgos potenciales para la salud.

A medida que los probióticos ganan popularidad, surgen preocupaciones sobre su posible transmisión de ARG a las bacterias comensales en nuestro intestino, lo que podría generar un reservorio de resistencia y aumentar el riesgo de infecciones por patógenos oportunistas.

¿Cuáles fueron los hallazgos?

En la investigación realizada, se identificaron ARG responsables de la resistencia a fármacos comunes como la tetraciclina, eritromicina, doxiciclina y estreptomicina. Este descubrimiento es alarmante, pues pone en evidencia que la adaptación diferencial de algunos probióticos a entornos de laboratorio, específicamente a la estreptomicina, provoca que adquieran resistencia de manera más eficiente a otros antibióticos, lo que incrementa el riesgo de transmisión de dicha resistencia a otras bacterias patógenas a través de procesos de co-inoculación en modelos celulares.

Más allá de las implicaciones a corto plazo, este estudio abre la puerta a un análisis más profundo sobre el uso de probióticos. Si bien estos suplementos son considerados beneficiosos y prometedores en múltiples aplicaciones alimentarias y médicas, sus efectos a largo plazo sobre la salud intestinal y general del ser humano siguen siendo inciertos.

La transferencia de ARG a patógenos que inicialmente no portaban dicha resistencia y su posterior proliferación podría significar un aumento en la dificultad para tratar infecciones bacterianas comunes, que podrían tornarse más letales y resistentes a tratamientos estándar.

 

¿Qué podemos hacer como consumidores?

Es esencial que, como consumidores, mantengamos un enfoque crítico hacia el consumo de probióticos. Antes de decidir agregar estos suplementos a nuestra rutina diaria, es fundamental considerar no solo sus beneficios, sino también los riesgos potenciales asociados y que deberíamos consultar a un médico antes de consumirlos. La comunidad científica necesita realizar más estudios comparativos en modelos animales y humanos, incorporando enfoques metagenómicos avanzados para evaluar de manera integral la seguridad de estos suplementos.

 

Importante

Esté estudio habla de suplementos de probióticos comerciales y que con frecuencia son de libre venta y consumimos por recomendación. Pero esta resistencia también se puede generar cuando abusamos de consumo antes o después de un esquema de antibióticos

 

¿Qué podemos concluir sobre el uso de probióticos?

Comenzar el año tomando probióticos puede ser una buena intención, pero es crucial hacerlo con información y precaución y sobre todo que acudas con tu médico para determinar si es necesario que los tomes y que no deben tomarse por tiempo prolongado o en grandes dosis.

 

¿Estás considerando incorporar probióticos a tu dieta o ya lo haces?

 

 

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