Cuidar el peso durante el embarazo es más importante de lo que imaginas, la obesidad materna se ha relacionado con el desarrollo de enfermedades cardiovasculares y diabetes en los hijos, pero no es todo, también podrían desarrollar hígado graso no alcohólico, así lo siguieren nuevas investigaciones.
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La metodología detrás de estos resultados

 
1. Se identificaron a personas menores de 25 años con diagnóstico de hígado graso no alcohólico.
2. El diagnóstico de la enfermedad se realizó por medio de biopsia, entre los años de 1992 y 2016.
3. De cada paciente seleccionado para el estudio se recabaron los datos de seguimiento del embarazo de la madre poniendo especial atención en el IMC (índice de Masa Corporal).
4. El estudio fue realizado en Suiza.

¡Estos fueron los hallazgos más relevantes!

• El IMC de la mamá tuvo una fuerte asociación con el desarrollo de hígado graso en los hijos.
  • Los hijos de madres que tuvieron bajo peso o peso normal durante el embarazo no tuvieron mayor riesgo de desarrollar hígado graso.
  • Los hijos de madres con sobrepeso u obesidad presentaron un riesgo significativo de presentar hígado graso e incluso mayor riesgo de cirrosis por esta causa.

Importante

 
Las asociaciones fueron similares después de ajustar parámetros como: preeclampsia materna y diabetes gestacional.
También se consideraron y ajustaron parámetros socioeconómicos (tabaquismo, madre nacida fuera de los países nórdicos y menos de 10 años de educación básica) ya que también se asociaron con el desarrollo de hígado graso no alcohólico en los hijos, pero no alteraron sustancialmente el tamaño del efecto del IMC materno.

Conclusiones

Es contundente la evidencia acerca de la importancia de cuidar el peso durante el embarazo, las madres con sobrepeso u obesidad tendrán hijos más propensos a desarrollar hígado graso no alcohólico, si a esto le sumamos factores de riesgo que vayan desarrollando los hijos durante su vida, podrían comprometer seriamente su salud hepática.
 

Es muy importante que las mujeres embarazadas lleven un control adecuado del peso durante el embarazo y que preferentemente lo hagan de la mano de su ginecóloga y un nutriólogo, ellas sabrán que es lo mejor para cada paciente y que no sufran de descompensaciones nutricionales.